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El estado de alarma sumado a las vacaciones de verano de nuestros hijos ha generado que padres e hijos convivan 24 horas al día los 7 días de la semana. Si a esto sumamos el trabajo (aún teletrabajo en algunas familias) y las tareas del hogar tenemos como resultado un profundo desgaste emocional en padres y madres.
Este desgaste emocional puede crear en nosotros, los padres y madres, una sobrecarga emocional.
Creo que todos somos conscientes de que no estamos acostumbrados a estar tanto tiempo con nuestros hijos, ni tampoco ellos con nosotros. Tras tanto tiempo juntos suelen aparecer situaciones de tensión. Estas situaciones suelen terminar en rabietas, frustraciones y salidas de tono.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que esta pandemia que estamos viviendo ha generado una rotura de la mayoría de los hábitos que antes teníamos. Toda la estabilidad diaria que teníamos como familia ha desaparecido casi por completo y nos afanamos en establecer una nueva rutina estable creando en nosotros una carga mental y emocional importante.
Todo esto crea en nosotros una ansiedad y un estrés que pueden llegar a valores insospechados. Las ganas de colaborar se nos acaban, saltamos a la mínima y esto ocurre incluso en familias en las que la calma, la cooperación y la paciencia rebosaban por los cuatro costados.
Por todo esto, en este programa número 10 y primer programa de la segunda temporada de Estuviendo vengo a traeros buenas noticias. Vengo a daros algunos consejos sobre cómo mejorar este agotamiento emocional.
- Reparto de tareas: y con esto no solo me refiero a las del hogar sino también a las referentes a los hijos. Cuando la lista de tareas que tenemos a nuestras espaldas es infinita se nos quitan las ganas hasta de empezar. Por eso es importante que el reparto de tareas esté muy bien definido. Por supuesto, dependiendo de la edad y capacidad de nuestros hijos, ellos también entrarán en este reparto así trabajamos también la autonomía y la colaboración.
- Tiempo de descanso: cuando yo era alumno escuché que cuando uno estudia debe descansar cinco o diez minutos por cada hora de estudio. Yo creo que todos los estudiantes se toman esta medida a rajatabla incluso los hay que invierten las cifras pero bueno, cada uno se organiza como puede y quiere. En cuando a nosotros como padres también debemos planificarnos nuestro tiempo de descanso personal, es decir, un tiempo para nosotros solos en el que hagamos lo que nos apetezca. El tiempo dependerá de cada familia y lo dejo a vuestra elección. Pero si cumplimos estos descansos nos vamos a sentir realizados al final del día ya que hemos hecho algo provechoso para nosotros o satisfactorio y esa ansiedad, esa carga emocional llena de responsabilidades será menor. Además, afrontaremos el día siguiente de mejor forma, mejoraremos el humor y nuestra autoestima.
- Sacar la pelota de nuestro campo: la mejor forma de realizar algo es en equipo. Por eso el apoyo en las decisiones y problemas que sucedan es fundamental. Cuando cada progenitor va por un sitio distinto el problema se agrava y las normas nos quedan claras. Si nuestros hijos descubren esto estamos perdidos. Utilizarán esto para sacar beneficio de cada situación y es ahí donde nuestra paciencia llega al límite y pueden darse situaciones que no ayudan en la educación de nuestros hijos: gritos, discusiones sin acuerdo, etc. Por eso hay que remar siempre en la misma dirección y ceder el turno de palabra a la otra persona. Cuando una situación se descontrola pasa el relevo y deja que la otra persona tome el timón. Durante ese momento tendremos tiempo de tomar aire e intentar ver la situación despegándonos de la parte emocional.
- Empatía: con esta situación que estamos viviendo no lo estamos pasando muy bien que digamos. Pero debemos tener en cuenta que no somos los únicos que lo estamos pasando mal. Nuestros hijos también están sufriendo esta situación y el desgaste emocional está presente en ellos. Por eso, ser capaces de salir de nosotros mismos para ponernos en su lugar puede ayudarnos a mejorar ese desgaste del que estamos hablando en este programa.
- Tira de contactos: aunque debemos seguir manteniendo las medidas de seguridad, las reuniones con familiares y amigos están permitidas. Esta ayuda puede nos vendrá muy bien para recargar pilas y mejorar nuestra estabilidad emocional. También podemos aprovechar para aumentar nuestro “tiempo de descanso” o para hacer cosas en pareja. Las reuniones con amigos que tengan hijos también ayudará a que nuestros hijos se relacionen con otras personas que nos sean sus padres.
Por supuesto, todos estos consejos para mejorar nuestro nivel emocional son muy bonitos en el papel. Seguramente en algún momento perdamos la paciencia y la situación se descontrole un poco, subamos un poco el tono o directamente le digamos a nuestro hijo que me tiene harto. Pero si somos conscientes de que lo hemos hecho mal, hasta esto nos puede ayudar a mejorar y a que la siguiente vez tengamos más ganas de buscar otro recurso para no llegar a eso. La imaginación genera situaciones nuevas. Seguro que muchas de ellas darán muy buen resultado.
Hasta aquí el programa de hoy. Ya sabéis que si os apetece comentarme algo lo podéis hacer a través de ivoox, si lo escucháis ahí, o en el correo estuviendo@gmail.com o directamente en la página estuviendo.es
Si os ha gustado el programa y os ha parecido interesante la mejor manera de agradecérmelo es haciéndolo llegar a otras familias para que también puedan escucharlo y opinar acerca de este tema. Muchas gracias a todos y todas